"Conectar campo y ciudad para encontrar un futuro común" es el gran objetivo del IV Congreso Nacional de Desarrollo Rural, que tendrá lugar en Zaragoza del 10 al 12 de febrero en el marco de celebración de la Feria Internacional de Maquinaria Agrícola (FIMA). El lema elegido es: "Campo y ciudad. Un futuro común".
En la carta de presentación del Congreso Nacional se apunta: "Las cadenas cortas, el comercio de proximidad, los productos locales, la agricultura ecológica, los huertos urbanos o las nuevas modalidades de turismo rural son fenómenos emergentes fuertemente interrelacionados, que ofrecen nuevas posibilidades para conectar el campo y la ciudad".
Joaquín Olona, decano del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Aragón, Navarra y País Vasco (entidad organizadora del Congreso), apunta que el medio rural debe hacerse valer por su condición de productor de alimentos, y en esa producción es fundamental la agricultura.
Joaquín Olona reivindica, por tanto, la importancia de la agricultura para el desarrollo rural. Éste se cimenta en tres pilares: Competitividad (productividad) agrícola, medio ambiente y desarrollo equilibrado del territorio. El decano de los Agrónomos defiende que, sin menosprecio del medio ambiente y del desarrollo territorial, se debe prestar una mayor atención a las estructuras agrarias.
Considera que este capítulo, el de las estructuras agrarias, debe tener un apoyo más sólido. Y lo debe tener en todos sus ingredientes fundamentales: Incorporación de jóvenes, modernización de explotaciones, regadío, formación, tecnología,...
Todo el mundo coincide en que bienes y servicios tan imprescindibles como los alimentos, el agua, la energía, el paisaje o la biodiversidad están vinculados al mundo rural; sin embargo (y tal y como se apunta desde la propia organización de este Congreso Nacional), "mientras la ciudad refuerza sus estructuras y centros de decisión, las instituciones rurales tradicionales y esenciales para la sostenibilidad se debilitan".
Estamos en el año 2014, declarado por la Asamblea General de la ONU "Año Internacional de la Agricultura Familiar". De ello se hablará en el Congreso Nacional de Desarrollo Rural, ya que "la desaparición de las explotaciones familiares provoca trasvases de población hacia la ciudad generando problemas de congestión urbana, marginación social, despoblación rural y desarticulación territorial".
Por tanto, "el futuro mayoritariamente urbano amenaza la cultura rural". Y ahí llega el sentido de organizar un Congreso Nacional sobre la relación entre campo y ciudad; porque "la conexión con la ciudad es fuente de nuevas oportunidades de trabajo y servicios para el medio rural".
En el IV Congreso Nacional de Desarrollo Rural se analizarán las posibilidades de futuro común entre campo y ciudad, a través de las experiencias y nuevos retos que se tratarán en cuatro bloques:
- La nueva Programación del Desarrollo Rural 2014-2020 ante los retos del campo y la ciudad.
- FIMA: 50 años trabajando a favor del campo y la ciudad.
- La agricultura familiar ante los nuevos retos del campo y la ciudad.
- Ocio, natura y cultura: Agricultura en la ciudad.
Como ha quedado dicho, este Congreso Nacional se celebra en el marco de FIMA 2014. Precisamente "la mecanización agraria fue determinante para liberar del campo la fuerza de trabajo que hizo posible el desarrollo urbano e industrial que ahora disfrutamos y sufrimos; una mecanización que sigue siendo un factor clave de la innovación que permite el continuo aumento de productividad agrícola exigido por nuestra sociedad".